Militar la educación, lugar maestro.
Pensar en lxs maestrxs icufistas de hoy es reconocerse en el lugar de herederxs y creadorxs. Herederxs de un legado y creadorxs desafiantes de propuestas de contexto y nunca más pertinente hacer esta afirmación hoy.
Las trayectorias de Kogan, Gordon, Blitz, Braslavsky, Pain, Berenztein y tantas y tantas más son espejos en los que se miran docentes de kinder, grupos de adolescentes, colonias, campamentos, escuela y jardín.
El día de las maestras y de los maestros es una oportunidad de reunir a los de entonces con los de hoy.
La historia hace a veces una jugada interesante. Esta semana es un buen ejemplo. Nos permite celebrar y recordar. Celebrar entrega, dedicación, constancia y creatividad y recordar en nombre de los de entonces a Berta Braslavsky a 12 años de su partida.
En Berta, como en todxs lxs otrxs, hay testimonio de compromiso con la educación y con la vida. Hay militancia. Hay proyectos de futuro. Como hoy.
En Berta, se reconoce el esfuerzo de una niña que transita desde el medio rural de una colonia en Entre Ríos hasta la medalla de oro en el Normal 7 de Buenos Aires. Está presente la militancia estudiantil y política con exoneraciones y detenciones. Está la solidaridad y el internacionalismo en su participación en las campañas de solidaridad con la República española, con las tropas aliadas, contra el nazi fascismo. Está el exilio. Está la convicción de la lectura y la escritura como derecho.
Rubén Cucuzza la presentó en un prólogo de un libro como correligionaria en defensa de los derechos humanos; compañera en la lucha por la paz, la justicia y el trabajo; camarada de la utopía y de la vida; cofirmante de las solicitadas contra la marginación y la pobreza, militante por la extensión de las oportunidades de acceso a la educación; asociada en la difusión de la lectura y la escritura; miembro plena de la defensa de la alegría.
Así era, así eran lxs de entonces. En su reconocimiento se forman y actúan lxs de hoy.
Hay pasado y desde el presente hay futuro.
Ana Diamant