Nota Pública
Buenos Aires, 11 de Mayo de 2018
La Federación de Entidades Culturales Judías de la Argentina – Idisher Cultur Farband (ICUF Argentina) participa de la condena general que ha merecido la conducta de la Comisión Directiva de la Delegación de Asociaciones Israelitas de Argentina (DAIA). Es sabido que esta organización es un cuerpo en estado de descomposición y un lobby de las autoridades del Estado de Israel para decir lo que su gobierno no puede hacer de manera pública. Además, la DAIA es el “brazo judío” de la Alianza CAMBIEMOS – PRO tampoco debe sorprender a nadie.
Lo que sí puede sorprender es el conjunto de firmantes que impugnan y cuestionan a la actual conducción. ¿Estamos olvidando que hasta hace una semana eran voceros “calificados” de cada una de las manifestaciones de la DAIA? ¿Qué estatura moral pueden tener quienes avalaron todas y cada una de sus posturas? ¿Ahora se quieren purificar criticando y asumiendo el papel de fiscales?
Estamos en presencia de una conducta institucional reprochable, como lo es la de todos aquellos que, a pie juntillas, fueron incondicionales y acreditaron sus enunciados tanto en materia de política nacional como internacional. Mucho tiempo ha transcurrido desde que DAIA dejó de ser la “representación política” de la colectividad judía de Argentina. En el mejor de los casos, lo era solo de una parte, y nada más. Sus declaraciones y actitudes de repudio ante expresiones de antisemitismo, fascismo o de discriminación se desdibujan a la luz de sus componendas con el establishment local y mundial.
Su sionismo seguidista la ha condenado a ser un simple furgón de cola de otros, que son los que deciden. ¿Habrá una DAIA democrática, en la que estén representados todos los judíos argentinos, más allá de sus posturas políticas? ¿Habrá una DAIA en la que sus dirigentes sean elegidos a través de la participación de los asociados de las instituciones adheridas? ¿Habrá una DAIA en la que sus conducciones no sean producto de transacciones espurias? ¿Habrá una DAIA que represente el sentir político del conjunto de la colectividad judeoargentina, sin ser “los judíos del poder”?
Daniel Silber, Vicepresidente
Isaac Rapaport, Secretario General
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