Con el único y exclusivo fin de sostenerse en el poder, el Gobierno Nacional pide auxilio y acepta los condicionamientos que le permiten recibir el apoyo financiero de Estados Unidos.

El poder Ejecutivo está dispuesto a entregar el patrimonio, el trabajo y el futuro de todas y todos los argentinos, no solo con esos condicionamientos sino también, mediante la baja de las retenciones a cero para la producción agropecuaria.

Las declaraciones del presidente Donald Trump, su secretario de Finanzas Scott Bessent y su embajador en nuestro país, Peter Lamelas, apoyando al Gobierno de Javier Milei son injerencistas. 

En estas, los funcionarios emitieron opiniones sobre las medidas económicas que debería tomar el Gobierno argentino y, también, sobre ajustes en las cláusulas ocultas del acuerdo que representarían un alineamiento incondicional con la geopolítica de Estados Unidos.

La eliminación de las retenciones —que duró 3 días— les permitió a las corporaciones exportadoras de cereales obtener una ganancia millonaria que no va a llegar a los pequeños y medianos productores. Además, provocó un achicamiento de los recursos del Estado, el que opta por ajustar más una economía ya exhausta y cruel con los sectores vulnerables.

Quienes integramos la Federación de Entidades Culturales Judías de la Argentina —ICUF— denunciamos estas maniobras: la entrega de soberanía, la acción injerencista de terceros países sobre la vida política Nacional, y la ofensa continua de estos hacia la población.

La convivencia y la democracia están constituidas sobre las bases de una patria libre y soberana, y no podemos permitir que sean los mercaderes del capital y sus secuaces locales quienes destruyan lo que tanto costó construir al pueblo argentino.

 

Marcelo Horestein – Presidente

Marcos Saal – Vicepresidente