Santiago Maldonado se encuentra desaparecido desde el 1° de agosto pasado, tras la represión que Gendarmería Nacional desató sobre la comunidad mapuche Pu Lof, en el departamento Chushamen, en la provincia de Chubut.

El joven participó de una protesta en el asentamiento, en apoyo a la causa que llevan adelante desde esa comunidad mapuche por la liberación del dirigente Jonas Huala, si bien no forma parte de esta población.

La represión, violenta, dejó numerosos heridos y nueve personas fueron detenidas.

Los integrantes de la Comisión Provincial por la Memoria, junto a la familia del joven, que permanece desaparecido, realizó una conferencia de prensa en la sede del organismo bajo una sola consigna: su “aparición con vida”.

Los testimonios de diferentes testigos de la represión aseguraron que Maldonado fue detenido y secuestrado por las fuerzas federales —los escuadrones de Gendarmería N º 34 de Bariloche, Nº 35 de El Bolsón, Nº 36 de Esquel, Ramos Mejía y Rawson—.

Esas mismas fuentes informaron que escucharon a la Fuerza Nacional decir: “Tenemos a uno”, y que cargaron a alguien en la camioneta. Desde entonces, no se sabe nada del joven.

Los voceros de Gendarmería Nacional indicaron que no conocen el paradero de Maldonado ni tienen pruebas de que haya sido llevado en uno de sus vehículos durante las acciones.

En su comunicado oficial, el Juzgado Federal de Esquel instó a todos los testigos a dar su testimonio. También afirmó que comenzaron a realizarse diversos rastrillajes por la región —con cooperación limitada de la comunidad mapuche—, que aún no tuvieron ningún resultado.

La Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, afirmó que no existen indicios de que Gendarmería haya trasladado a Maldonado en sus vehículos ni que este haya siquiera estado en el lugar de los hechos. Lo dijo con base en las afirmaciones del juez a cargo de la causa, Guido Otranto.

Es, al menos, llamativa la inacción tanto de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación como la de la Subsecretaría de Derehos Humanos de la provincia de Buenos Aires, cuando una de sus funciones fundamentales es resguardar y proteger la seguridad individual de los ciudadanos.

La Federación de Entidades Culturales Judías de la Argentina – Idisher Cultur Farband (ICUF Argentina) renueva su reclamo, junto a otras organizaciones sociales, de derechos humanos, políticas y culturales, en la demanda de la aparición con vida de Santiago Maldonado y la investigación de este hecho con el objetivo de establecer las responsabilidades correspondientes en este grave suceso.

Marcelo Horestein

Presidente

Isaac Rapaport

Secretario General