Cuando el Gobierno argentino decide cambiar el rumbo histórico de la posición de neutralidad de la política exterior y se involucra en el conflicto de Medio Oriente, construye el marco para que sectores fascistas crean encontrar la excusa que suponen los habilita para expresar sus profundas convicciones, esas que se fundamentan en la discriminación y el odio.

La pintada antisemita en uno de los monumentos ubicados en el Parque Rivadavia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es una clara manifestación de aquellos sectores que demuestran ser los continuadores de agrupaciones como la Alianza Libertadora Nacionalista, Tacuara o la Liga Patriótica.

Quienes integramos la Federación de Entidades Culturales Judías de la Argentina –ICUF– expresamos nuestra más enérgica condena, exigimos a las autoridades nacionales, y al Poder Judicial el esclarecimiento, la identificación y el castigo de los responsables materiales e intelectuales del hecho.

La sociedad toda debe impedir la naturalización de cualquier tipo de discriminación. Es imprescindible la denuncia y visibilización de cualquier acción de odio y violencia. No se deben volver a repetir.