Cuando parecía que la libertad del ex presidente Luiz Inacio Lula Da Silva en Brasil y el triunfo electoral de Alberto Fernández en Argentina abrían un nuevo ciclo en América del Sur, el golpe de Estado en Bolivia, impulsado por las derechas más reaccionarias, racistas, xenófobas y homofobas ponen un punto y aparte.

Es indudable la mano de la CIA y de las corporaciones multinacionales de los paquetes agropecuarios tecnologícos (semillas, agrotoxicos, etcétera). El golpe de Estado contra Evo –al igual que otros procesos como los de Brasil, Paraguay, Argentina, Ecuador) es producido por sus aciertos en lo referido a una distribución más equitativa y democrática de la riqueza, y no a sus errores o falencias.

El gobierno de Argentina no se ha pronunciado, aplicando el doble rasero, con otros gobiernos de la region. El Icuf, en defensa de la democracia, repudia este golpe de Estado, rechaza el accionar violento de los «grupos cívicos» y se solidariza con Evo Morales, su gobierno y el pueblo boliviano.

Marcelo Horestein, Presidente

Isaac Rapaport, Secretario General